Habrá algo que no se haya dicho ya sobre J
uan Carlos Ramírez Abadía, alias Chupeta, que no se haya dicho ya a raíz de su captura en Brasil? No lo creo.
uan Carlos Ramírez Abadía, alias Chupeta, que no se haya dicho ya a raíz de su captura en Brasil? No lo creo.Sin embargo, queremos aquí decir algo más. Y empezaría por preguntar algo que se le atraganta a uno: De dónde sale eso de la proverbial astucia (y hasta inteligencia, le dicen) que se le atribuye a nuestros narcos? Porque hay que ver a los policías de aquí, de allá y de acullá, pintándolos casi como seres inasibles, imposibles de detectar, gracias a, sí, como no, su astucia infinita, su malicia indígena, su inteligencia malévola, etc.
Pues, uno entiende a la policía. Alguna excusa tienen que tener para justificar la millonada que se gastan los países en la persecución de años de estos siniestros personajes, para resultar siendo capturados por un policía de tránsito o por culpa de una cirugía plástica tan horrorosa que los hace sospechosos a una simple mirada.
Porque, volviendo al caso Chupeta, no se cree uno ni una coma de la versión policial oficial. Eso de un seguimiento de dos años y que una cosa y la otra es pura carreta. Lo que delató al capo de marras es lo que todos sabemos que los delata: Su inmensa capacidad para la lobería y la fantochada que acarrean tantos millones de dólares acumulados en el negocio rápido de la droga.
Cómo puede decirse de un tipo que es astuto cuando se hace una cirugía facial espantosa que lo dejó con una pinta de travesti en quiebra. Y que además, para hacerse más notorio, se va a vivir a una casa lujosísima de un sector exclusivo de Sao Paulo, con una modelo como mujer, sector en el cual un colombiano con una pinta tan maluca debe chillar como un moco en una corbata.
El tal Chupeta fue a hacer a Brasil lo que hacía en Cali hace varios años: vivir a lo desaforado, rodeado de lujos imposibles y de mujeres llamativas. La diferencia resulta en el hecho de aquí en Cali los policías de esa época (y los de ahora también, según las ultimas noticias) eran ciegos, sordos y mudos, por causa de un raro y difundido virus asociado a los billetes verdes que circulaban profusamente. Allá, en Brasil, probablemente el virus no alcanzó a afectar a todos.
Pero, sospecha uno que lo que realmente sucedió fue que a Chupeta lo delató, no una exhaustiva investigación, sino alguna vecina ventanera que decidió, con buena lógica, que un tipo tan feo, tan lobo y tan rico no podía ser nada bueno.
Lo demás, dejémoselos a los policías, que de algún cuento tienen que vivir.
Vopa:
ResponderBorrarLo sorprendente en todo este teje maneje del bajo mundo, porque lo llamarn bajo? si estamos viendo como los del "alto mundo" estan involucrados con Chupetas, Mancusos,
Bobos Jojoyes ,en forma tan estrecha que llega uno a confundirlos y hasta a dudar cuales son los "bajos" o quienes son los "altos",cuando Jorge 40 o el Monoleche, se asoman por los predios sagrados del Capitolio, luciendo todos sus chirimbolos y trajeados al ultimo grito de la moda , los padres de la Patria , tambien llamados Senadores y Representantes, lucen como vulgares desarrapados,ñapangos irredentos o cenicientos, bien acicalados en cambio ,los recien estrenados de "cachacos" aun con olor a monte,reparten sonrisas baraticas y mas que sarcasticas que los fotografos -periodistas medio lambizcones o tarados captan en todos los angulos y poses tratando cada uno de cogerles la "chiva" , contrasta su elegancia y acicalamiento con el desaliño de una Piedad Cordoba, apretujando sus pellejos en tensas fajas , con elegancia de "bulto de carbon" , piropeada solo por el gorilon caraqueño , de pinta semejante y parecida bemba.
Entre periodistas mas que mediocres, politicones interesados en sus billeteras , gamonales temerosos de sus confesiones , servidores publicos flojitos de piernas y hasta cachuchones poco santos, han creado una cierta casta de "hijodalgos" o nobleza bellaca , invirtiendo valores y haciendo apologia a sus crimenes aberrantes y repulsivos, tejen historias que situan a esos narcoterroristas cmo personajes de un mundo kafkiano, donde son ellos quienes mandan la parada, sus victimas, viudos y huerfanos , son solo espectadores de ese drama macabro y asqueante.
Aullan los malditos vestidos de nobles confesando lo inconfesable , crimenes que avergüenzan a las fieras , con frialdad calculada, mientras sus victimas con humildad franciscana preguntan por sus muertos y entre lagrimas y rabias reciben las coordenadas donde fueron "motosierrados" y enterrados en fosas comunes sus amados esposos e idolatrados hijos, muecas satanicas de Mancusos y Jorges 40, enmarcan el ambiente , a mas confesiones , mas perdones...
Con culpabilidad o sin ella hemos creado una sociedad de criminales horrendos , nos hemos encargado de elevarlos a categoria de heroes, para ellos el Capitolio es un paseo , el asedio periodistico , los titulares de prensa y el tiempo de la TV. son sus golosinas , miremos revistas, periodicos, repasemos noticieros de radio y t.v., son ellos quienes copan el espacio, parece que vivimos la era de lo absurdo, ya no podemos distinguir claramente si son , nobles ,heroes o bellacos....
Dudoso